Como habíamos adelantado, el intendente Javier Olaeta vetó la ordenanza que establecía la creación de la Casa Municipal de Estudios Universitarios de Arrecifes en la ciudad de Rosario, proyecto elaborado por el concejal Sebastián Reigosa y aprobada por unanimidad el pasado 28 de septiembre.
Mediante un decreto, Olaeta resolvió vetar tres artículos de esa ordenanza, argumentando, entre otras cosas, que “es inconveniente que la Municipalidad alquile a título propio y asuma la administración de la residencia por la imposibilidad de control de las pautas de convivencia”, y la devolvió al Concejo.
Este miércoles el Concejo Deliberante debatió sobre ese veto e, increíblemente, los ediles de Juntos por el Cambio apoyaron la postura del Intendente que contrariaba lo que ellos mismos habían aprobado hace menos de un mes y luego de un profundo estudio.
Esta actitud del oficialismo generó un fuerte y largo debate, con argumentos inexplicables de parte de Juntos tratando de explicar su cambio de postura, imposible de justificar.
El presidente de esa bancada, Martín Reddy, se defendió diciendo que “si el Intendente nos hace ver que hicimos algo mal, yo no tengo problemas en aceptar el error”. Y después quiso explicar que “la ordenanza sigue vigente, porque la vetó parcialmente, algunos artículos, pero el tiempo para el veto total ya se había vencido”, un argumento irrisorio que no existe.
Pero ahí Reddy metió la pata, porque aceptó que el tiempo para el veto del Intendente se había vencido.
Fernando Bouvier, del bloque Juntos-PRO aclaró que “nadie hizo nada mal, la ordenanza está perfectamente aprobada y la Municipalidad perfectamente puede alquilar la casa”, además de mostrar ejemplos similares de otros municipios.
En medio de esta irracionalidad del oficialismo, hasta se propuso que sean los padres de los chicos que van a vivir en la casa los que la alquilen…
Luego de un extenso debate y también un largo cuarto intermedio, y de la indignación de los bloques de la oposición con sus pares radicales, prevaleció la aplicación de la ley (a la que el oficialismo también se negó; o sea, a cumplir la ley) y el decreto del Intendente no se trató porque el veto fue hecho fuera de los plazos establecidos.
Lo triste de todo esto es que, mientras tanto, por decisión de los funcionarios y concejales radicales, los estudiantes de Arrecifes en Rosario no tendrán una casa para vivir a un costo de sólo $ 3.000 por mes, pese a que el dinero para solventarla también está en el presupuesto 2022.