El hecho ocurrió la noche del último miércoles en la estación de GNC “Géminis Gas”, ubicada en la avenida Palacios de la ciudad salteña de Orán, adonde la sargento de policía Sofía Chaparro llegó a bordo de un Ford Fiesta junto a sus hijos.
Según la fiscalía, dicho auto es 50% propiedad de la mujer y otro tanto de su exesposo.
Una vez en la estación, las ocupantes del rodado descendieron y la policía le pidió al playero que le realizara una carga mínima de gas, momento en que el auto explotó, tal como quedó registrado en un video de las cámaras de seguridad del lugar.
Tras el estallido, los presentes advirtieron que el auto y los alrededores quedaron cubiertos de un polvo blanco que, luego se determinó, era cocaína.
También por la explosión volaron varios paquetes envueltos con papel amarillo y que contenían más de esa droga.
Los pesquisas que trabajaron en el lugar tras el arribo de la policía estimaron que la cantidad de estupefaciente que había en el tubo de gas alcanzaba los 20 kilos.
Tanto la droga como cinco teléfonos celulares que pertenecen a Chaparro y a sus hijas fueron secuestrados por efectivos de Gendarmería Nacional (GNA) que quedaron a cargo de la investigación y peritajes en el marco del caso.
A su vez, el hijo de 13 años de la sargento sufrió una lesión leve en un ojo, por lo que debió ser asistido en el hospital de Orán.
Las fuentes dijeron que fue en ese centro asistencial donde en una primera declaración sin validez legal ante la policía, Chaparro dio por primera vez la versión de que desconocía que había cocaína en el tubo de gas del auto y que acababa de sacarlo del taller mecánico.
Antes de la audiencia, la policía se hallaba detenida en la sede del Escuadrón 20 de Orán de GNA, y ahora se aguarda a que el juez resuelva si continúa alojada en ese sitio o si es enviada a algún penal.
Los pesquisas cuentan ahora con 60 días para recabar información acerca de la procedencia de la cocaína y cuál era el destino, al tiempo que procurarán establecer si la policía desplegó la maniobra de manera individual o si pudo haber integrado alguna organización, añadieron las fuentes.
Los informantes policiales agregaron que hasta hace una semana el sargento cumplía funciones no operativas en la fuerza, ya que tenía un problema de salud, y que había viajado a Corrientes desde donde se dirigió a Salta antes de regresar a Buenos Aires.