Vecinos que residen en un predio ubicado en calle Saavedra casi esquina Corrientes se dirigieron hoy temprano por la mañana al Palacio Municipal con intenciones de hablar con el intendente Javier Olaeta. El motivo es que pretenden desalojarlos del lugar, un terreno que alguien ha puesto a la venta y donde ellos tienen montadas sus precarias viviendas.
Unas 15 personas fueron recibidas por el secretario de Gobierno, Sergio Aldazabal, quien relató la situación desde el móvil de Radio Uno (107.1):
“Los vecinos vinieron a hablar con mucho respeto. No existió ningún conflicto ni nada por el estilo. Lógicamente están preocupados porque la mayoría hace muchos años que vive allí y ahora se ve que han puesto en venta ese predio y les han ofrecido lotes a un valor que no pueden pagar de ninguna manera. Algunas familias sostienen que en su momento han pagado un dinero por esos terrenos pero no tienen ningún comprobante que lo acredite; otros reconocen que lo han usurpado”, explicó el Dr. Aldazabal.
“No saben tampoco quién es el dueño de ese predio. Nosotros, como Municipalidad, lo que podemos hacer es primero averiguar a quién pertenece y tratar de determinar quién fue en su momento la persona que les cobró. Vamos a mediar tratando de hallar una situación a este problema, pero si termina siendo un conflicto entre particulares debe intervenir la Justicia, a nosotros nos excede como Estado”, aclaró el secretario de Gobierno.
Más tarde, desde el humilde asentamiento, también por Radio Uno (107.1) hablaron algunos vecinos: “Nosotros no podemos pagar lo que nos piden, si apenas nos alcanza para comer. Vino una inmobiliaria a poner un cartel de venta y nos pidieron $ 285.000 para quedarnos con el terreno. Después el hombre de la inmobiliaria se retiró del negocio porque dice que él no quiere tener problemas. No sabemos quiénes son los dueños. Lo que sí sabemos es que no tenemos dónde irnos a vivir. Yo tengo cinco chicos; hay personas mayores, hay discapacitados, hay muchos chicos más acá. Encima, cuando el río crece nos inundamos. Esto era un monte, un basural cuando nosotros vinimos y lo poco que pudimos hacer lo hicimos a pulmón”, relató Fabio Ríos (37), quien dice mantiene a su familia sólo con changas esporádicas.
Otra mujer comentó que vive junto a su hija en una habitación hecha con chapas y una lona, con piso de tierra, sin agua y sin luz. Encima sufre de una discapacidad: “No es digno vivir así pero no tenemos otra cosa. Imagínense si nos desalojan, quedamos en la calle. Fuimos a hablar con la gente de la Municipalidad para que nos ayude, que nos dé una solución”, dijo la señora de nombre Rosa.