Palermo le ganó ayer a Almirante Brown por 2 a 0 y clasificó para la final de los playoffs del Clausura, eliminando al Verdinegro.
Vale aclarar que la victoria del Cervecero fue justa, ya que jugó mejor que Brown y tuvo las chances más claras, aunque en el segundo tiempo los de Caña Peralta los metieron en un arco.
Pero la polémica aún resuena por el gol que puso en ventaja a Palermo, a poco de comenzado el partido. Fue a raíz de un penal absolutamente inexistente, inventado por el árbitro Mancini cuando el arquero verdinegro tapó en forma magistral un mano a mano.
El otro arquero, Patricio Luján, lo convirtió en gol de Palermo. Y quizás la historia pudo haber sido otra de no existir ese penal que no fue.
El que sí fue, a favor de Brown y el árbitro no vio, es el que muestra la foto, cuando casi le arrancan la camiseta a Damián Gutiérrez.