El último sábado, José Luis Gómez denunció que por problemas de salud debió ausentarse de su domicilio, ubicado en calle Venezuela, durante una semana. Y al regresar constató que autores ignorados, sin ejercer violencia, habían ingresado por una ventana lateral sin traba colocada. Le sustrajeron un CPU y un monitor de una computadora, un teléfono celular, un módem portátil y una garrafa.
El domingo, en tanto, Adriana Mabel Fernández denunció que el sábado se retiró de su vivienda, ubicada en calle Rivadavia, y que el regresar a la mañana del día siguiente comprobó que autores ignorados ingresaron a su casa forzando una ventana. Le robaron un equipo de música y una garrafa.