Una joven de 18 años denuncio haber sido secuestrada por su ex pareja, de la cual está separada desde hace dos meses, quien la habría interceptado cuando se dirigía a la guardia del Hospital San José. El hecho ocurrió en Pergamino.
El masculino se habría sentado en la moto que manejaba la victima detrás de ella obligándola a conducir hasta su casa, donde la encerró, la torturo golpeándola con un cable y mojándola con agua fría.
Segun trascendió, durante la madrugada, mientras el sujeto dormía, la chica habría intentado escapar del lugar pero el hombre se despertó y volvió a golpearla.
En horas de la mañana, la madre de la víctima se presentó dos veces en el domicilio del imputado; en primera instancia el individuo le tapó la boca a la joven con una almohada para que no gritara, pero la segunda la liberó, abriéndole la puerta y empujándola hacia afuera.
Una pesadilla
El hecho ocurrido en la vecina ciudad, que trascendió recién este sábado, se produjo el miércoles cuando la joven de 18 años le pidió prestada la moto a un vecino para ir al Hospital porque le dolía una muela.
La pesadilla comenzó alrededor de las 20:00, cuando se detuvo en la esquina de Barrancas del Paraná y Liniers.
Según consta en la denuncia, el sujeto de 33 años con quien había estado de novio durante cuatro años, se sentó detrás y le tapó la boca con el buzo de la víctima, amenazándola con apuñalarla si no lo hacía.
De esta manera la obligó a conducir la moto hasta su domicilio ubicado en inmediaciones de Florencio Sánchez y Larrea, donde la encerró poniéndole llave a la puerta.
Al parecer, el individuo le pidió que se sacara la ropa y ante la negativa le pegó con un cable negro y luego la mojó con agua fría con una manguera.
Alrededor de las 5:00 de la madrugada del jueves, mientras el sujeto dormía, la joven intentó abrir la puerta y escapar, pero el hombre se despertó y volvió a golpearla.
Liberación
A la mañana siguiente, la mamá de la víctima se presentó en el domicilio de la expareja de su hija, pero al verla por la ventana el individuo amenazó a la chica para que no gritara y le habría tapado la boca con una almohada, por lo que al no escuchar movimientos la mujer se retiró.
Finalmente, cerca del mediodía la progenitora regresó al domicilio y en esta oportunidad el sujeto abrió la puerta y empujó a la joven hacia afuera.
Tras radicar la denuncia, el cuerpo médico de la Policía constató golpes en distintas partes del cuerpo.
El hecho está caratulado como lesiones, amenazas y privación ilegal de la libertad, en trámite ante la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio Nº 4, a cargo de la doctora Karina Pollice.
Fuente: Pergamino Verdad