Marcos Di Palma se hace el loco y el mal piloto, pero no es ni una cosa ni la otra. Bah, loco un poco… Se toma sus responsabilidades con seriedad y así lo hizo en su retorno al automovilismo luego de ocho años de inactividad.
Probó en dos oportunidades en el Autódromo de Buenos Aires con su viejo auto de Top Race, que volvió a poner en marcha, se entrenó físicamente (si bien siempre lo hace) y se alistó de la mejor manera posible para la fecha de dos pilotos de TRV6 que se disputa este fin de semana en el Coliseo porteño.
Marcos corre como invitado del uruguayo Michell Bonnin, debutante en la categoría, y sorprendió con su rendimiento en las pruebas de clasificación este sábado, volviendo a la competencia de primer nivel con 48 años de edad.
El piloto más popular del país fue décimo en la clasificación de pilotos invitados, registrando un tiempo de 1m23s954 en su mejor vuelta al circuito 8, quedando a 90/100 del mejor, Matías Rossi, y a apenas 15/100 de uno de los mejores en actividad, como Emiliano Spataro, por ejemplo, y a 37/100 de Mauricio Lambiris.
En tanto, superó por 38/100 a su sobrino Josito, que se ubicó 13º como invitado de Stefano.
El piloto titular del Toyota al que se subió Marquitos, fue casi medio segundo más lento que el arrecifeño y se posicionó 12º en su tanda. Como la clasificación general se realiza sumando el tiempo de ambos, la dupla Bonnin-Di Palma largará el domingo desde el puesto 12.
Diego Azar-Matías Rossi parten desde la pole (los dos fueron los más veloces en sus respectivas tandas) y Stefano y Josito Di Palma lo harán desde el puesto 10 (Fefo fue séptimo en su grupo).
Será una carrera dividida en dos, en la que alternará titulares e invitados pudiendo iniciarla cualquiera de ellos.