A las 8 de la mañana del domingo, los Bomberos Voluntarios de Arrecifes arrancaron el Día del Padre trabajando. Debieron acudir a un incendio en la estancia La Criolla, propiedad de Luis Gerli, ubicada en el paraje La Blanqueada.
Allí se tomaron fuego 15 rollos de fardo de avena, ubicados en la mitad del lote, cerca del casco de la estancia. Más de dos horas demoraron los bomberos para sofocar el siniestro que, según Gerli, fue intencional. El propietario del campo aseguró que es imposible, con la humedad que había, que el incendio haya sido espontáneo; además de que la avena no se enciende si no se la prende fuego a propósito.