(VIDEO) Nombrar a algunos sería olvidarse de otros que quizás hicieron tanto o más. Por eso, a los organizadores y a todos quienes participaron del Festival Solidario a beneficio de Carolina Romanini y sus hijos Christian y Jeremías, sólo nos queda decirles gracias, gracias, gracias.
En la noche de este viernes, en el patio del Club Argentino rebalsado de público (se calculan unas 800 personas) se vivió un espectáculo sencillamente maravilloso, de una calidad excelsa. Todos los espectáculos brillaron, cada uno con su estilo, en una puesta en escena impecable como nos tiene acostumbrados este grupo que realizó La Novicia, Matilda y tantos otros shows musicales.
No alcanzan las palabras para elogiar tanta calidad artística y humana, porque más allá de la perfección estuvo puesto el corazón. De todos. Desde los sonidistas e iluminadores, que no cobraron un centavo, pasando por quienes recibían los tickets en las entradas, por la comisión del Club Argentino, por quienes atendieron las cantinas, hasta el fuera de serie Juan Carlos Baglietto.
Dijimos que no íbamos a nombrar a nadie, excepto a Baglietto. Porque ha escrito uno de los capítulos más importantes de la historia artística y musical argentina, porque es una gloria viviente, porque mantiene su increíble nivel musical y porque se sumó a esta cruzada solidaria viajando exclusivamente para ponerle la frutilla a este delicioso postre.
Conmovidos por la música y por la causa, con el alma llena luego de cuatro horas disfrutando de talento puro, la multitud ovacionó de pie el cierre del músico rosarino y el corazón puesto en esta realización.
Gracias, gracias, gracias.