En la tarde de hoy, un conmocionante hallazgo se produjo en una vivienda ubicada en calle Frascheri 527.
Walter Bordes, enfermero del Hospital Municipal “Santa Francisca”, hacía dos días que no concurría a su trabajo. Y fue hallado muerto en su domicilio.
El joven tenía 31 años y decidió quitarse la vida inyectándose una sustancia en su cuerpo (que será determinada en la autopsia), con pleno conocimiento de que ello le iba a causar la muerte, ya que por su formación en el área de la salud lo sabía perfectamente.
Bordes, quien según amigos venía manifestando intenciones de tomar una determinación semejante, dejó una carta escrita explicando las razones de su dramática decisión.
Sus compañeros de trabajo y conocidos, se vieron conmocionados al conocer la trágica noticia. Y después de su muerte hasta le dejaron mensajes de despedida en su página personal de Facebook. Un día muy triste para Arrecifes.