Aproximadamente 35 familias abandonaron hoy viviendas que habían usurpado en el barrio que se está construyendo en La Cumbre.
Luego de recibidas las 75 órdenes de desalojo firmadas por el juez Ricardo Pratti, el intendente Daniel Bolinaga abrió un canal de diálogo con las familias ocupantes, instándolas a dejar en forma voluntaria esas unidades habitacionales para evitar el inminente desalojo compulsivo.
El propio jefe comunal se reunió hoy en la Dirección de Acción Social con muchas de esas personas.
Hasta este sábado por la tarde se contabilizaban 35 desalojos voluntarios, con camiones y personal de la Municipalidad colaborando en el traslado de los muebles. Simultáneamente, entre la Policía y personal privado se custodia esas casas para que no vuelvan a ser usurpadas.
Se presume que más familias seguirán yéndose. No obstante, otro grupo se mantiene con la lamentable intención de resistir el desalojo que cumplirán efectivos de Infantería.