En la tarde/noche del último martes se produjo un incendio en una quinta ubicada en ruta 51, camino a Ramallo, propiedad de la familia Borrell (ex quinta de Menéndez). Más precisamente en la vivienda que ocupa el casero del lugar.
Hacia allí se dirigieron varias unidades de Bomberos Voluntarios para sofocar el fuego que ya se había expandido. Se quemaron por completo dos habitaciones de la casa, en la que en ese momento no había ocupantes.
Pero los servidores públicos arrecifeños encontraron una perra dentro de la vivienda, que por la inhalación de monóxido de carbono estaba desvanecido. Lo rescataron y le iniciaron maniobras de RCP, tapándole la nariz y abriéndole la boca para darle oxigeno mediante un tubo, a la vez que presionaban su pecho tratando de que recupere el funcionamiento de su corazón y pulmones. A los pocos minutos consiguieron que la perra despierte y antes de retirarse los bomberos del lugar, el can ya estaba caminando.
Otra tarea elogiable de nuestros bomberos, que de no mediar su actuación el perro hubiera muerto.