Es por la queja de vecinos de Recoleta, molestos por la vigilia de militantes.
El gobierno de la Ciudad de Buenos Aires decidió vallar este sábado las inmediaciones del domicilio de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, en el barrio porteño de Recoleta. Militantes de diversas organizaciones sociales, políticas y estudiantiles llevaban seis días consecutivos desarrollando una vigilia allí para apoyar a la vicepresidenta, tras los alegatos del fiscal Diego Luciani, en la causa Vialidad.
La policía colocó cerca de las 6 de la mañana del sábado una serie de vallas en la calle Juncal, entre Talcahuano y Parana, y en Uruguay, entre Montevideo y Arenales. Son de gran altura, unidas por un alambrado y son custodiadas por la Policía de la Ciudad. Solo pueden pasar los vecinos que viven en el lugar. Las vallas entorpecen el tránsito del lugar.
En la madrugada, a causa de las lluvias los militantes se desconcentraron y el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta aprovechó para cercar la zona.