La Secretaría de Servicios Públicos del Gobierno de Arrecifes recuerda a la comunidad la prohibición de la poda de árboles públicos en forma particular y practicada por personas no idóneas en la materia.
Quienes desconozcan esta prohibición, regulada por ley provincial y ordenanza municipal, recibirán las correspondientes actas de infracción de acuerdo a lo establecido por el marco legal.
Recordamos que el arbolado público es propiedad de la ciudad, no de los frentistas. Y quienes deben hacerse cargo de las multas por alterar la vida de los ejemplares arbóreos, son los propietarios del inmueble en el que se encuentran.
Los beneficios que el arbolado brinda a una ciudad son numerosos. Además de embellecer las calles y proveer de sombra, las plantas son purificadoras de la atmósfera pues retienen partículas de polvo en sus hojas, atenúan y filtran los vientos, atemperan los ruidos molestos reduciendo la contaminación sonora y morigeran las temperaturas máximas y mínimas extremas.
Un árbol situado en un medio que le conviene y al que se ha adaptado poco a poco, que no sufra coacciones especiales en su expansión aérea o subterránea y que no presente señales de debilidad o de ataques parasitarios, no necesita ni debe ser podado.
En consecuencia, el Gobierno de Arrecifes iniciará en el mes de mayo un plan de poda de mantenimiento, con personal especializado, solamente en los casos en que sea necesario.
Al mismo tiempo informa que se está trabajando en un programa de protección, mantenimiento y ordenamiento del arbolado público, en conjunto con la empresa EDEN (en los casos en que los árboles interfieran el tendido de la red de energía eléctrica), bajo la supervisión de la ingeniera forestal Cecilia Contreras, del Ministerio de Asuntos Agrarios de la provincia de Buenos Aires.