Sebastián Reigosa busca sumar en las elecciones del 14 de noviembre los pocos votos que le faltaron en las PASO para llegar al Concejo Deliberante.
Con su experiencia de tres períodos como edil, en RADIO UNO (107.1) el candidato de “Vamos con Vos” analizó la función de los concejales:
“No se puede generalizar y no me refiero a ninguno en particular. La valoración del trabajo de los distintos concejales corresponde que la haga la ciudadanía a través de su voto. Yo hablo por mí y por lo que hicimos los representantes del Socialismo cuando nos tocó ocupar una banca, y hay excusas que escucho y no comparto ni acepto bajo ningún punto de vista”, prologó Reigosa.
“Un concejal no puede decir que ‘no podemos hacer nada porque estamos en minoría’. Hay muchas herramientas para poner en práctica cuando la mayoría ignora proyectos o pedidos de los bloques minoritarios; entre ellas, citar a los funcionarios municipales. Y en caso de que el Ejecutivo tampoco dé respuestas, los concejales tenemos que ir a la Municipalidad o a cualquier dependencia municipal y pedir la documentación que necesitemos. Es obligación del Ejecutivo entregarle a los concejales lo que soliciten y, fundamentalmente, darle explicaciones a su pueblo, que es el que los votó. Así lo hicimos siempre los socialistas”, consideró Sebastián.
“En esta campaña también escuché al candidato Guillermo Sbuttoni, con todo el respeto que me merece, decir que si es electo va a ocupar una banca y que a su vez va a seguir colaborando con el Intendente. Eso es una barbaridad, porque se trata de un claro conflicto de poderes. El Concejo Deliberante está para controlar al Departamento Ejecutivo, y obviamente no te podés controlar a vos mismo. Pero en los últimos años la institucionalidad del Concejo se ha degradado muchísimo, hasta ese límite”, puso como ejemplo.
“Los concejales debemos trabajar con responsabilidad y compromiso, seamos mayoría o seamos uno solo en un bloque. Que a nadie le queden dudas que así lo voy a hacer, como siempre lo hice. Para calentar una banca me quedo en mi casa y no peleo tanto pretendiendo cambiar las cosas para vivir en un Arrecifes mejor. Hay concejales a los que no les conozco la voz; hay otros a los que no les veo hacer nada. Y si los concejales actuáramos así en el ámbito privado, nos echarían a patadas. Pregúntenle a cualquier particular que tenga empleados que no cumplan ni trabajen ¿qué hacen con ellos? Y nosotros no somos más que empleados del pueblo; a eso no tenemos que olvidarlo nunca”.