El comunicado de la Municipalidad de Arrecifes señala: “Este viernes 12 de octubre a las 11:00 se entronizará en la plazoleta Cabo Papini (ingreso al Balneario Municipal), el monolito en homenaje al Camino Real. Un capítulo de nuestro pasado señala que Arrecifes fue parte del Camino Real, el cual unía Buenos Aires con Córdoba y el Alto Perú. Un lugar mencionado en reiteradas ocasiones en la historia de nuestros pagos, a partir del ‘paso de los arrecifes’. De ahora en más, lo recordaremos y abordaremos la historia local y regional desde una nueva óptica”.
La realidad es que este proyecto nace a partir de Susana Fratino, quien el 25 de abril de 2016 presentó una nota en el Concejo Deliberante. Esa iniciativa se transformó luego en ordenanza y ahora se concreta a través del Departamento Ejecutivo Municipal.
El problema radica en que el proyecto establece que el monolito se coloque en lo que era originariamente el Camino Real, la actual Vuelta del Perro, en el tradicional “puentecito”, para que el turismo visite el lugar y conozca su historia.
Ninguno de estos objetivos se cumple con la inauguración del monolito en un lugar que no tiene nada que ver con el camino y que, además, estaba siendo proyectado para la colocación de una obra en homenaje a Cacho Vellón, un recordado y reconocido amante y defensor del río Arrecifes.
En Radio Uno (107.1), el vecino Marcos Casella hizo público este reclamo (realmente válido, porque no se está cumpliendo la ley municipal) y adelantó que irá a hacerlo también este viernes en el momento y lugar del acto.