En un curioso acto que muchos señalan como discriminación, la Municipalidad de Pergamino excluye del uso del natatorio municipal a las personas que padezcan cierto grado de obesidad.
Esta llamativa e inexplicable medida se conoció cuando el diario pergaminense Primera Plana publicó parte del instructivo entregado por la Dirección de Deportes local a quienes cumplen funciones en el recientemente reabierto natatorio ubicado en el Parque Municipal General San Martín de la vecina ciudad.
En el punto 2 de ese documento (protocolo de control sanitario ante el Covid-19) titulado “Advertencias”, se expresa que “quedan exceptuadas de asistir a las actividades deportivas/recreativas de verano (tanto en funciones laborales como participantes)” y luego enumera una serie de características sanitarias, entre ellas una que llama mucho la atención, ya que detalla que entre los excluidos se encuentran “personas con obesidad con IMC (índice de masa corporal) igual o superior a 40 kg/m2 (obesidad grado 3)”.
Es curiosa este impedimento porque profesionales de la salud y la educación física ponderan las bondades de la natación para personas con sobrepeso, fundamentalmente por ser un ejercicio de “bajo impacto”, que no castiga articulaciones y otorga todas las ventajas de la actividad aeróbica.