En la tarde de este sábado, la ciudad bonaerense de Colón se vio sorprendida por la aparente caída de nieve durante varios minutos, cubriendo con un manto blanco autos estacionados y plazas y calles desiertas por el frío.
El fenómeno meteorológico en realidad no fue nieve sino graupel, un tipo de precipitación formado cuando las gotas de agua sobreenfriadas en la atmósfera impactan contra la masa de aire. Suele ser mucho más blando y frágil que el granizo, que es una precipitación sólida y más dura.
El graupel tiene un aspecto esponjoso, cómo pequeñas bolitas de hielo blanco, que suele aplastarse cuando se toca, a diferencia del granizo, que por su consistencia, no se rompe fácil.
Esta “lluvia blanca” de desencadenó después de una tormenta con granizo incluído, sorprendiendo a todos los colonenses, grandes y chicos, que salieron a disfrutar de la supuesta nevada.
La inusual situación de observó también en Rosario y otras localidades del sureste de la provincia de Santa Fe.