Este viernes falleció Nydia Colombo de Ciminari, a los 97 años de edad. Y pese a que tuvo el privilegio de vivir mucho más que la mayoría de los mortales, parecía que ese momento no llegaría nunca.
Es que la querida y admirada Nydia gozaba de una lucidez única para su edad, y de un inquebrantable compromiso social, con la educación y la comunidad, hasta sus últimos días.
A dos años y meses de llegar a los 100, esta ejemplar mujer continuó involucrándose a través de las redes sociales, donde dejaba sus sabias opiniones y consejos, siempre pensando en el prójimo. Su último posteo en Facebook fue el 27 de diciembre, con otra de sus sabias reflexiones.
Docente desde la formación de varias generaciones de alumnos hasta directora y férrea luchadora por la educación pública. Fue una pieza clave en la conformación de la Federación de Educadores Bonaerenses, también pionera de las escuelas de Viña y de La Luisa. Como símbolo de la educación, en la inauguración de la Nueva Escuela Secundaria fue elegida madrina del establecimiento por el entonces intendente Daniel Bolinaga.
Estas líneas no alcanzarían para enumerar todo lo que Nydia le dio a la educación.
También fue una persona muy participativa políticamente. Peronista de Perón, conoció a Evita y mantuvo inquebrantables sus convicciones patriotas, desde dentro de diversas instituciones y también desde afuera. Jamás abandonó su espíritu de preocuparse y trabajar por los demás.
Luchadora como pocos, fue también responsable de construir y sostener una familia ejemplar. Desde su viudez y hasta sus últimos momentos, fue el ejemplo y el faro que guió a hijos, nietos, sobrinos, bisnietos y a todos quienes acudían en busca de su cariño y sus consejos. Porque Nydia siempre estuvo en todo y para todos.
Con la resignación de aceptar que su vida se apagó, su familia seguramente quedará con la tranquilidad y el orgullo de saber que esta enorme mujer dejó un valiosísimo legado en toda una comunidad.
Gracias por tanto, Nydia. Y gracias por las generaciones que formaste y que seguirán transmitiendo tus valores de lucha, respeto y amor. Que en paz descanses. Dios te estaba guardando un lugar privilegiado a su lado y vos te ganaste un recuerdo imborrable en la Tierra.