Las intensas y prolongadas precipitaciones de los últimos días provocaron un nuevo desborde del río Arrecifes, obligando a la recurrente evacuación de familias que residen en la zona ribereña.
Como siempre, el Cuerpo de Bomberos Voluntarios inició esta tarea con el consiguiente despliegue de las áreas de asistencia de la Municipalidad, que deben disponer lugares y logística para atender a los evacuados.
Pasó poco más de un mes de la anterior evacuación y el río volvió a salirse de su cauce. Otra vez los inconvenientes de siempre. El problema no es que el río desborde; el tema es que cuando baja se vuelve a llevar a la gente a vivir al mismo lugar.