(Video) Como parte de las celebraciones por el Día de la Patrona, el último domingo la Banda Sinfónica Nacional de Ciegos se presentó en Arrecifes, con un concierto al aire libre ofrecido en el atrio de la Iglesia San José.
Ante una importantísima cantidad de público ubicado en Plaza Mitre y colmando la esquina de Ricardo Gutiérrez y Rivadavia, los setenta músicos no videntes ofrecieron un espectáculo maravilloso, conmovedor, con la interpretación de siete piezas que variaron entre lo clásico y el tango.
La dirección del maestro José Luis Cladera merece un párrafo aparte. No sólo brilló en la conducción de sus músicos sino que logró una increíble empatía con el público, al que integró en todo momento al concierto. Además de sus dotes musicales, que lo llevan a dirigir esta Sinfónica, mostró una enorme calidad humana y una enorme sensibilidad hacia las personas con otras capacidades. Así lo hizo notar cuando tomó el micrófono para manifestar su emoción luego del tema que bailaron los chicos del Taller Protegido dirigidos por el profesor municipal Daniel Acevedo. Sobre el final, Cladera dirigió simultáneamente a su banda y al público que acompañaba emocionado con palmas.
Fue una noche cargada de emoción, de lindas y fuertes sensaciones que unieron a todos los presentes: los artistas y la gente. Esta excelente iniciativa de la Presidencia de la Nación, que los arrecifeños tuvimos el privilegio de presenciar gracias a las gestiones realizadas por el intendente Daniel Bolinaga, nos demuestra que cuando priman la sensibilidad y la unidad, se pueden lograr cosas maravillosas. Así lo destacaron el maestro Cladera: “La verdadera patria está aquí, en el interior”, y el cura párroco Adrián Galligani: “Estoy realmente emocionado; agradezco al Intendente y su equipo por traernos este hermoso regalo para la Virgen”.
Hubo mucha gente en la Plaza, aplaudiendo sostenidamente y de pie cada interpretación. Pero espectáculos como éste merecen un auditorio muchísimo mayor; es una pena que haya arrecifeños que se lo perdieron.
“Ojalá nos inviten otra vez”, dijo uno de los músicos no videntes, que sintió el calor del público. Por supuesto, ya fueron invitados para cuando sus compromisos les permitan volver a nuestra ciudad.