Ricardo Gutiérrez perdió anoche un partido increíble ante Argentino, en Arrecifes, por la cuarta fecha del Clausura 2017 de la Asociación Pergaminense de Básquet. Fue 66-65 en el último segundo de un partido que el Tricolor fue ganando siempre.
Además de caer en este particular duelo ante el rival de las polémicas finales del Apertura, Gutiérrez perdió el invicto y puso en riesgo las chances de terminar primero en la Zona A, cuando aún resta disputarse una ronda.
El equipo de Paqui Bóveda manejó las acciones del juego y superó al ganador del Apertura, pero un par de fallos de los árbitros en el tramo final sacó de eje al equipo y el nerviosismo lo llevó a cometer errores que le impidieron cerrar el juego a su favor.
Perjudicó al Tricolor una inentendibe falta técnica cobrada a Gabriel Oddi, supuestamente por simular un foul; pero también el local se perjudicó solo cuando Adrián Di Lenarda se hizo cobrar otro técnico por protestar desde el banco (no es la primera vez que le pasa) y cuando dejaron libres a los mejores lanzadores de triples de Argentino para que conviertan uno más y den vuelta el resultado sobre la chicharra final (Gutiérrez ganaba 65-63).
Está claro que determinados fallos arbitrales habitualmente nos desfavorecen, pero también es hora de poner la cabeza en frío y hacer autocrítica. En esta oportunidad el banco tricolor perdió la calma y no tuvo la inteligencia para cerrar un partido que tenía ganado.