María Alejandra Quiroga, domiciliada en el barrio 60 viviendas de Arrecifes, se encontró el domingo a la noche con la sorpresa de una llamativa imagen apareciendo en una de las cortinas de su casa.
“Yo vi a Cristo, claramente”, le dijo la protagonista de esa historia a Mónica Teves en Radio Zero (100.3). “Venía de una semana muy difícil y creí que lo había visto yo sola, porque es como que lo necesitaba. El lunes con la claridad del día es como que la imagen no se vio más, pero a la noche volvió a aparecer y la vio toda mi familia”, agregó. “Aparte la imagen es grande: debe tener unos 25 o 30 centímetros”.
Esta martes por la tarde, en su muro de Facebook, Alejandra pidió calma por la situación: “Cuando subí la foto de la imagen no pensé que iba a repercutir de esta manera. No me arrepiento, pero no voy a permitir que se haga de esto un circo ni un desfiladero en mi casa; tengo una vida y no voy a alterarla. No se necesita ver para creer. Si quieren ver a Jesús, busquen en su interior, Él está con y en cada uno de nosotros. Esta será una anécdota mas para contar”.
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