A las 6:15 del viernes 26 se recibió un llamado en la Comisaría, al 101, denunciando que en calle Ramón Lorenzo entre Av. Merlassino y Santiago H. Pérez había dos sujetos abriendo automóviles.
Personal policial se dirigió de inmediato hacia el lugar y logró dar con dos masculinos que se ocultaban entre los autos estacionados en esa cuadra.
Se procedió a identificarlos, constatando que se trataba de dos menores de edad. Uno de ellos escondía entre sus ropas un GPS que había sido robado de un auto y el otro pibe, mostraba la particularidad de que se había defecado encima.
Los uniformados comenzaron a buscar el auto del cual habían robado el GPS, encontrándolo en S. H. Pérez entre Lorenzo y Risso. El vehículo se hallaba con la puerta del acompañante abierta y con materia fecal sobre el asiento de ese lado. Entrevistado el propietario, constató el faltante de su GPS.