El estado de abandono de muchos espacios públicos y calles de Arrecifes sigue creciendo triste y sorprendentemente. Y en el primero de los casos, es inentendible ya que ni siquiera se trata de falta de recursos (que la Municipalidad los tiene y el Intendente se vanagloria de la buena administración económica); se trata de falta de ganas de hacer, evidentemente. Lo que no se está haciendo es lo que cualquiera de nosotros hacemos en nuestras casas: cortar los pastos, limpiar la basura, ordenar y tirar lo que no sirve. Ninguna ciencia.
Uno de los tantos casos, y más grave por su visibilidad, lo muestra esta foto. Así se veía la principal entrada a la ciudad este sábado, una de las “caras” de Arrecifes, la que mostramos también a las miles de personas que a diario pasan por nuestro querido pueblo por ruta 51. Es lamentable, vergonzoso: yuyos altísimos, basura desparramada por todos lados, enormes ratones y hasta un auto abandonado tirado sobre el terraplén de la colectora.
¿Por qué llegamos a esto? Es difícil de comprender. Hace más de medio año que los arrecifeños nos estamos acostumbrando a convivir con la mugre, con muchas calles de barrios abandonadas e intransitable, con espacios públicos absolutamente descuidados. Llama la atención. Esta gestión municipal se caracterizó por mantener limpia y prolija la ciudad, pero parece haber desistido de esa tarea.