Un hombre, de 52 años, su esposa y una hija del matrimonio fueron hallados muertos en un pozo de agua de un campo cercano a la localidad chaqueña de San Bernardo, homicidios por los cuales no había detenidos hasta este domingo.
El primer cuerpo encontrado fue el de Margarita Giménez, luego de que su madre, Rosa Solís, decidiera el pasado jueves visitar la casa donde la joven vivía con su marido y su nena de un año en inmediaciones al paraje “El 42”, tras pasar varios días sin ningún tipo de noticias de la familia.
Solís no encontró a nadie en el interior de la vivienda, por lo que se dirigió hacia un sector de la chacra, donde sintió un olor nauseabundo que provenía de un pozo de agua. Allí, logró ver el cuerpo de su hija, por lo que dio aviso a la Policía.
En el interior del aljibe los uniformados encontraron a Giménez y a su hija. Poco después dieron con el cuerpo del padre de la familia, Ramón López, en un pozo con agua a unos 30 metros de la casa, tapado con palos.
Junto al cuerpo del hombre también se habría encontrado escondida entre las malezas una moto Zanella de 50 cilindradas, que sería propiedad de la víctima.
Según las primeras investigaciones, la muerte de la joven madre y su hija habría ocurrido por fuertes golpes en la zona del cráneo, mientras que el hombre presentaba un orificio en su espalda, que sería compatible con una herida de arma de fuego.
Los cuerpos presentaban un importante estado de descomposición, por lo que se presume que habrían transcurrido entre ocho y diez días entre los homicidios y su hallazgo.
Fuente: diariolaopinion.com.ar