Aproximadamente a las 21 de ayer se produjo un nuevo accidente en ruta 8, de características espectaculares pero afortunadamente sin consecuencias físicas graves.
En el kilómetro 162 de la citada ruta, a 300 metros del Automóvil Club (zona peligrosa por las lomas), un Renault Sandero quedó volcado contra una alcantarilla. Como habitualmente ocurre, el accidente se generó por imprudencia de los conductores, ya que el único tripulante de este vehículo, oriundo de Pergamino y que circulaba en sentido a esa ciudad, se encontró de golpe con otro auto de frente sobre su mano, superando a uno que venía en sentido contrario. Fue allí que debió tirarse a la banquina, y volcó y dio contra una alcantarilla.
El hombre pudo salir del auto por sus propios medios y fue trasladado al Hospital Municipal sólo con golpes leves, afortunadamente. Pudo haberse matado, por la irresponsabilidad de otro conductor que siguió viaje como si nada hubiera pasado.
Cuatro dotaciones de Bomberos Voluntarios de Arrecifes trabajaron para retirar el Sandero del lugar donde había quedado.
Mucho se habla de la peligrosidad de la ruta 8 y es verdad que es absolutamente necesaria la construcción de una autovía. Pero la peligrosa zona de lomas existe desde siempre, está perfectamente señalizada con carteles de prohibido pasar y con doble línea amarilla. Sin embargo, nadie respeta nada y se tiran a superar vehículos igual, donde no se puede. Y lamentablemente la ruta no cuenta con un “sistema anti boludos”.