José Luis Di Palma es uno de los pilotos con mayor autoridad para opinar sobre automovilismo, por su extensa trayectoria y por la cantidad y variedad de categorías y lugares en los que corrió.
Entre ellos, Jóse estuvo en los Estados Unidos y Canada compitiendo en IndyLight, división menor de la IndyCar que comparten calendario.
En diálogo con Lonchi Legnani, de Campeones, el mayor de los hijos de Luis opinó sobre Agustín Canapino y fue más allá de todo lo leído y escuchado: “No he visto aún un elogio a la altura de lo que está haciendo Agustín. El salto que pegó es como de manejar un pipper (avión chico) a ir a la luna, sin pasos intermedios. Es antinatural, y lo está haciendo con un rendimiento sorprendente. Esto es una muestra de los talentos que tenemos en la Argentina”.
Di Palma, quien más allá de su experiencia sigue todo y sabe todo lo que pasa en el automovilismo internacional, destacó “el talento innato que tiene Agustín y la visión que tuvieron con su padre Alberto para encarar su campaña de una forma diferente. No hizo karting, fórmula, nada; y donde corrió, ganó. Su profesionalismo, estudio y conducta le suman a su talento el hecho de, por ejemplo, haberle dado un IndyCar para manejar por primera vez en un simulador y hacerle 8 décimas a su compañero de equipo. Está bien, es un simulador, pero es una muestra de lo que puede hacer en un auto real. Es increíble lo que está haciendo y no se sabe hasta dónde puede llegar”.