Sólo 40 años, apenas 40 años vivió este talentoso luchador que nació con el nombre de Oscar Luca y luego fue rebautizado Oky en las radios donde trabajó como operador técnico. Más tarde se conoció también como Luca Deep en su actividad como DJ, que comenzó a los 14 años por su amor por la música.
Duele mucho seguramente a toda la comunidad arrecifeña, pero especialmente en el ámbito del periodismo local, donde con la mayoría de nosotros supo compartir momentos de laburo. Oky era de ésos a los que no había que decirle ni indicarle nada, porque sabía todo sobre su trabajo y lo hacía a la perfección. Es más, le sobraba.
Enterarse anoche de su fallecimiento fue un durísimo golpe y cuesta creerlo. Si hasta las últimas horas estuvo preparando el cumpleaños de 15 de Sheila, donde este sábado 25 de abril iba a mostrar una vez más su magia para darle brillo a una noche que todos sabían no iba a fallar.
La radio LVA fue su segunda cada y donde más tiempo permaneció en los medios. Y la música, su vida.
“¡La puta madre, no puede ser!”, resuena en todos quienes lo conocieron. Y aún con el dolor a flor de piel, pero con la consciencia y resignación de lo irreversible, imaginar que en algún lado vuelve a encontrarse con el Negro Wanceslao para ser protagonistas de alguna fiesta a la que los habrán llamado.
Que descanses en paz, Oky querido. Fuerte abrazo y cariño a su familia y a sus más allegados.