Lo que comenzó como una denuncia por un violento robo a mano armada en la ruta nacional 188 terminó convirtiéndose en un caso de engaño cuidadosamente armado, que fue desbaratado tras una minuciosa investigación de la DDI Junín. El protagonista, lejos de ser una víctima, quedó detenido y ahora deberá responder ante la Justicia.
El episodio fue denunciado el 8 de diciembre, cuando un hombre se presentó en la Comisaría de Rojas asegurando haber sido asaltado horas antes, alrededor de las 17:00, mientras circulaba en un camión utilitario por el kilómetro 112 de la mencionada ruta. Según su relato, regresaba desde Pehuajó hacia Pergamino luego de entregar dos motocicletas pertenecientes a la empresa para la que trabajaba.
Siempre de acuerdo a la versión inicial, al detenerse en la banquina para cambiar un neumático habría sido abordado por dos individuos en una moto tipo cross roja, quienes, con cascos colocados y empuñando un arma de fuego, lo amenazaron y le sustrajeron su teléfono celular, tarjetas de la empresa, una suma de dinero en pesos y 12.000 dólares, producto de la supuesta venta de los rodados.
La gravedad del hecho motivó la inmediata intervención de la Fiscalía N° 4 de Junín y la Ayudantía Fiscal de Rojas, que ordenaron a la DDI Junín avanzar con las tareas investigativas. A partir del análisis de cámaras públicas y privadas, el seguimiento del recorrido del vehículo y el estudio de las comunicaciones, los detectives comenzaron a detectar inconsistencias.
EL DESCUBRIMIENTO DE LA FARSA
Con el correr de los días, la hipótesis del robo comenzó a derrumbarse. Las pruebas recolectadas permitieron establecer que el denunciante nunca había sido víctima de un ilícito, sino que había simulado el asalto valiéndose de la confianza depositada en él por la empresa para la que trabajaba.
La maniobra quedó aún más expuesta cuando se comprobó que, días después del supuesto asalto, el hombre había viajado junto a su pareja a la ciudad de San Lorenzo, Santa Fe, con la intención de adquirir una motocicleta. Ante este dato, la DDI Junín montó un operativo de interceptación sobre la Ruta Provincial 32, a la altura del kilómetro 151, con apoyo del Destacamento Vial El Socorro.
Allí fue interceptado un automóvil conducido por el denunciado, seguido por una motocicleta manejada por su pareja. Tras una requisa de urgencia autorizada, los investigadores hallaron en el interior del vehículo un sobre de papel madera, idéntico al que había sido denunciado como robado. En su interior había 5.100 dólares, dinero en pesos, documentación de compra-venta de una motocicleta, comprobantes de seguro, trámites de patentamiento y dos teléfonos celulares.
El hombre, empleado contratado hacía apenas unos meses y con posibilidades de continuidad laboral, quedó imputado por los delitos de hurto y falsa denuncia, debiendo ahora enfrentar las consecuencias judiciales de su accionar.
No obstante, la causa aún no está cerrada. La investigación continúa abierta con el objetivo de determinar si existió la participación de algún cómplice o apoyo logístico en la planificación del falso asalto que, por un tiempo, logró simular un golpe perfecto; hasta que la verdad salió a la luz.
Fuente: Casos Policiales











