A los 93 años, y condenado a varias cadenas perpetuas por las atrocidades que cometió como parte del aparato represivo de la dictadura, murió este sábado el excomisario Miguel Etchecolatz. Su nombre se convirtió con el tiempo en sinónimo de los momentos más tristes de la historia, asociado a la tortura, desapariciones y otros delitos de lesa humanidad cometidos en tiempos de la dictadura militar.
Etchecolatz estaba a cargo en ese momento del gobierno militar de la temible Dirección de Investigaciones de la Policía Bonaerense, cuya estructura operó como brazo ejecutor de las persecuciones, desapariciones y torturas ordenadas por el aparato represivo encabezado en la provincia por el general de brigada Ramón Camps.
Los múltiples juicios por delitos de lesa humanidad contra Etcehcolatz le valieron condenas ya desde 1986, y luego en 2004, 2006, 2014, 2016, 2018, 2020 y el año pasado, que equivalían a varias perpetuas que se terminaron unificando y lo mantuvieron en prisión hasta principios de este mes, cuando se le permitió por su edad y su estado de salud el arresto domiciliario.
Fuente: Perfil