El jurado popular de ciudadanos de Pergamino que analizó la responsabilidad penal de Luis Alderete en el homicidio del adolescente Benjamín Rojas, lo declaró no culpable este viernes al considerar que actuó en legítima defensa. La decisión fue alcanzada en un lapso de menos de veinte minutos, un tiempo inusualmente breve que sorprendió incluso a la defensa técnica del acusado.
La absolución, dictada por unanimidad por los doce integrantes titulares del jurado, es inapelable y no requiere fundamentos escritos por parte del Tribunal Oral en lo Criminal N° 1, presidido en este debate por el juez Guillermo Burrone. Con la lectura del veredicto, el proceso quedó concluido y se ordenó la inmediata liberación de Alderete, detenido desde el día del hecho, el 12 de agosto de 2023.
Un juicio de cuatro jornadas
El debate oral bajo la modalidad de juicio por jurados comenzó el martes con la selección de los ciudadanos llamados a integrar el cuerpo deliberativo. De las 49 personas citadas se presentaron 29, entre quienes fueron elegidos los 12 jurados titulares y 4 suplentes. Una vez conformado el tribunal popular, el fiscal Fernando D’Elío y la defensora Laura Abal expusieron sus alegatos de apertura.
El Ministerio Público anunció que demostraría la responsabilidad penal de Alderete como autor de homicidio simple. En contraposición, la defensa adelantó que acreditaría que el acusado había actuado bajo un profundo temor tras una serie de hostigamientos previos y que su accionar encuadraba en la legítima defensa.
La acusación fiscal
Durante la segunda audiencia, el miércoles, el fiscal D’Elío presentó a sus testigos para reconstruir la secuencia del crimen ocurrido en la tarde del 12 de agosto de 2023 en la esquina de Diego de la Fuente y Conscripto Silva. Según la versión de la acusación, Alderete y Benjamín Rojas se cruzaron en la vía pública y, en el marco de un forcejeo, el imputado le asestó dos puñaladas que provocaron heridas mortales. El adolescente fue trasladado al Hospital San José, donde falleció poco después.
La teoría de la defensa
El jueves fue el turno de los testigos convocados por la defensa, quienes relataron un escenario previo de conflictos vecinales, enfrentamientos y episodios de violencia entre ambas familias. Según estos testimonios, Alderete y sus allegados venían padeciendo persecuciones y amenazas reiteradas atribuidas a integrantes del clan Rojas, entre ellos el propio Benjamín y un tío, Juan Pablo Rojas.
Los testigos afirmaron que, en los días previos al hecho, el clima de hostigamiento se había intensificado y que Alderete vivía bajo un estado de “miedo permanente”.
La declaración del acusado
En la cuarta jornada, el viernes, Alderete decidió declarar ante el jurado. Con voz quebrada describió el temor con el que, según dijo, convivía desde hacía meses. Aseguró que nunca había agredido a nadie y que el día del hecho se defendió porque se sentía acorralado.
“No le deseo a nadie que pase por lo que yo pasé ni que tenga que hacer lo que yo tuve que hacer”, expresó ante los ciudadanos.
Un veredicto rápido y contundente
A las 13:40, el jurado se retiró a deliberar y, apenas veinte minutos después, el oficial de Justicia Daniel Pascual notificó a las partes que había una decisión.
El juez Burrone verificó que la documentación estuviera correctamente completada y pidió al presidente del jurado que leyera el veredicto. La frase fue breve y decisiva: “Encontramos al acusado no culpable, al haber actuado en legítima defensa”.
La resolución desató una fuerte reacción emocional en la sala. La abogada Laura Abal abrazó de inmediato a su defendido, en un momento de gran alivio tras más de dos años de detención preventiva.
Reacciones en la sala
Minutos después, cuando el juez comunicó que la libertad se haría efectiva desde la Unidad Penal 49 de Junín -donde Alderete permanecía detenido desde hace dos años y cuatro meses- los familiares del joven se acercaron entre lágrimas a abrazarlo, mientras personal del Servicio Penitenciario Bonaerense se disponía a trasladarlo.
En la sala permanecían también los familiares de Benjamín Rojas, quienes manifestaron su disconformidad con la decisión del jurado. El personal de seguridad debió desalojarlos para evitar incidentes.
A la salida, la defensora Abal expresó su satisfacción por la absolución y admitió que la velocidad de la deliberación la tomó por sorpresa: “Se hizo Justicia, aunque dos años y cuatro meses más tarde. Se hizo Justicia”, sostuvo.
Fuente: La Opinión Pergamino









